Uno de los altavoces más importantes de cualquier sistema de cine en casa es el subwoofer. Las frecuencias más bajas es un sonido que más que escucharse se siente y eleva el escenario sonoro de una manera que ningún otro componente de audio puede lograr, dando vida a las películas y la música de una manera visceral. Por eso muchos entusiastas del cine en casa no se conforman con incorporar a su configuración un solo subwoofer, especialmente si tienen una sala de cierto tamaño.
Y es que ya hemos hablado de los beneficios de utilizar dos subwoofers en nuestro sistema de cine en casa. Pero por resumir mucho y rápido, tener dos subwoofers proporciona una respuesta de graves más uniforme en toda la habitación. Pero una vez decidimos poner un segundo (o tercer) subwoofer en la sala puede que nos surja una duda bastante común: ¿puedo combinar un subwoofer sellado con uno con puerto bass reflex? La respuesta corta es «No», pero os vamos a explicar el motivo.
¿En qué se diferencia el sonido de los subwoofers con puerto y los sellados?
Antes de incorporar un subwoofer a nuestro sistema de cine en casa debemos decidir si lo queremos sellado o ventilado (con puerto bass reflex). ¿Cuál es la diferencia? El tipo de sonido que puede producir cada tipo de gabinete es diferente.
Los subwoofers sellados producen un sonido de graves más nítido, musical y contundente; mientras que los subwoofers con puerto se destacan por una extensión de graves más profunda y una salida más «visceral» capaz de golpear el pecho. Los gabinetes de subwoofers con puerto también son aproximadamente el doble de grandes que los sellados para dejar espacio para el puerto bass reflex.
Una creencia común es que los subwoofers sellados son mejores para la música y los portados para las películas, aunque no siempre es tan simple. Las preferencias de escucha, la distribución de la habitación y los factores del estilo de vida influyen. Aunque es cierto que los subwoofers ventilados se pueden «sellar», ya que tenemos la opción de colocar las espumas que suelen incluir, nunca será lo mismo que tener un modelo con gabinete sellado.
Por qué nunca deberías mezclar un subwoofer sellado con uno ventilado
Teniendo en cuenta que el sonido que emiten no es exactamente igual, es lógico pensar que mezclar un subwoofer de diseño sellado con un ventilado no es buena idea, ya que lo que podemos conseguir es que trabajen uno en contra de otro. Esto se debe a que tienen respuestas de fase muy diferentes, especialmente en la frecuencia de sintonización del puerto del modelo ventilado.
Como los dos subwoofers tienen respuestas de fase diferentes, las ondas sonoras se cancelarán entre sí en ese ancho de banda y obtendremos un rendimiento reducido en ciertas frecuencias. Esto se llama cancelación de fase y puede resultar en menos impacto y presión. Y precisamente al añadir este altavoz a nuestra configuración de cine en casa lo que buscamos es todo lo contrario, es decir, un mayor impacto y presión sonora para «sentir» las frecuencias más bajas.
Por este motivo siempre es recomendable utilizar dos subwoofers sellados o dos subwoofers ventilados, pero no mezclarlos. De hecho, lo ideal es que sean exactamente de la misma marca y modelo, si es posible, ya que a así la sinergia entre ambos modelos será perfecta.
Aunque es cierto que un solo sub suele producir una potencia de salida más que suficiente para dar energía a la mayoría de las salas, especialmente si nuestro espacio no es muy grande, si tienes la opción de poner dos subwoofers verás como el sonido cambia radicalmente. De hecho, son muchos los expertos que recomiendan usar dos subwoofers más pequeños en lugar de un solo subwoofer más grande, siempre que sea posible.
Vía | SVS
