Hay marcas que cuando lanzan algo nuevo, sabes que te va a llamar la atención sí o sí. Y JBL es una de ellas. No importa si eres de los que monta fiestas épicas o si simplemente quieres un altavoz pequeñito para llevártelo a la montaña, la marca siempre tiene algo pensado para ti. Esta vez no ha sido la excepción, y lo cierto es que nos lo han puesto difícil para elegir uno solo: tres lanzamientos de golpe, cada uno con su estilo y enfoque, pero todos con un denominador común: más potencia, mejores graves y conectividad a prueba de bombas.
Empezamos por el que más llama la atención por tamaño y potencia bruta: el Boombox 4, que viene con un 50 % más de potencia, menos peso y dos modos Bass Boost para que lo pongas a reventar sin miedo a distorsión. Pero ojo, que si lo tuyo son las fiestas grandes con luces y espectáculo visual, entonces el que te interesa es el PartyBox 720, un auténtico monstruo de 800 W que lo mismo te vale para una barbacoa que para montar un festival en tu jardín.
¿Demasiado grandes los dos? Pues JBL también ha pensado en eso, y ha lanzado el nuevo Grip, un altavoz ultraportátil que cabe en la palma de la mano, pero con sonido JBL Pro, AI Sound Boost y resistencia IP68.
Y como no podía ser de otra forma, todos comparten tecnología moderna y bien pensada. Auracast para emparejar varios altavoces, batería mejorada, iluminación LED, resistencia al polvo y al agua, e incluso personalización desde apps. JBL ha apretado el acelerador, y si estabas pensando en renovar tu altavoz Bluetooth, ahora mismo tienes más de un motivo para hacerlo.
Boombox 4, PartyBox 720 y Grip: tres estilos, un mismo sonido JBL
Empezamos con el más cañero de todos: el JBL Boombox 4. Lo mires por donde lo mires, es una evolución total respecto a la versión anterior. Para empezar, ahora tiene un 50 % más de batería y pesa 1 kg menos, así que es mucho más fácil de llevar de un sitio a otro. También incorpora logos LED que se iluminan en blanco o naranja cuando activas el Bass Boost, lo cual no solo es estético, sino que te indica de un vistazo si estás en modo Deep Bass (más envolvente) o Punchy Bass (más pegada y ritmo).
Y lo más interesante es que incluye AI Sound Boost, una tecnología que analiza la música en tiempo real y permite que los drivers rindan al máximo sin distorsionar, incluso cuando subes el volumen a tope. ¿Precio? 499,99 euros, disponible desde el 8 de septiembre.
Pero ahí no queda la cosa. El Boombox 4 también mejora por dentro: añade un tercer radiador pasivo y dos nuevos altavoces de rango medio, que sustituyen al subwoofer de antes y dan como resultado un sonido más equilibrado y potente. Tiene hasta 28 horas de autonomía que pueden subir a 34 con el modo Playtime Boost, además de que ahora la batería es reemplazable. También incluye audio sin pérdidas vía USB-C, algo que no solemos ver en altavoces Bluetooth.
Su peso total se queda en 5,9 kg, un 12 % más ligero que el Boombox 3, y como guinda del pastel, es resistente al agua y al polvo (IP68) y permite emparejamiento multipunto con otros altavoces gracias a Auracast. Vamos, que te lo puedes llevar a la playa, enchufarlo por cable o inalámbrico, y emparejarlo con otros JBL para montar una buena… sin preocuparte por nada.
¿Quieres algo aún más potente y pensado para animar a toda una fiesta? Pues agárrate porque la JBL PartyBox 720 es otro nivel. Estamos hablando de 800 W de potencia real, luces LED dinámicas sincronizadas con la música, dos woofers de 9 pulgadas y tecnología AI Sound Boost que exprime cada canción al máximo sin que el sonido se descontrole. Es, literalmente, una discoteca sobre ruedas. Porque sí, tiene ruedas más anchas y un asa ergonómica para moverla con facilidad donde quieras.
Y lo mejor: funciona con batería, así que no necesitas tenerla enchufada. Hasta 15 horas de autonomía, con opción a 2 horas más con solo 10 minutos de carga rápida. Eso sí, las baterías se venden aparte. Estará disponible a partir del 1 de octubre por 899,99 euros.
Y como es habitual en JBL, no han escatimado en detalles. El sonido es JBL Pro de alto nivel, con dos tweeters de 30 mm que aportan unos agudos cristalinos y bien definidos. Puedes controlar todo desde la app JBL PartyBox: ecualización, iluminación, modos de sonido… Incluso tiene efectos de luz tipo estrellado o estroboscópico para que el ambiente cambie al ritmo de la música.
También incluye entradas XLR, por si te apetece enchufar un micrófono, una guitarra o una mesa de DJ, y un conector Jack-XLR híbrido para asegurar compatibilidad con todo. Además, es resistente a salpicaduras (IPX4) y permite emparejarla con otros altavoces compatibles vía Auracast. Vamos, que no es solo para poner música: es el centro de control de cualquier fiesta que se precie.
Y por último, pero no menos importante, el JBL Grip. Pequeñito, compacto, pero con muy mala leche (en el buen sentido). 16 W de potencia, sonido JBL Pro, AI Sound Boost, hasta 12 horas de autonomía (14 con Playtime Boost), gancho para colgarlo donde quieras, certificación IP68 contra agua, polvo y caídas, y encima fabricado con materiales reciclados. Lo puedes conectar con otros Grip o altavoces JBL gracias a Auracast y personalizar la luz trasera desde la app. Y todo esto por 99,99 euros. Ya está disponible en la web oficial en siete colores, desde el clásico negro hasta un morado o un camuflaje que queda brutal.
¿Con cuál me quedo?
La verdad… depende de lo que busques. Si eres de los que quiere potencia portátil, el Boombox 4 es un acierto seguro. Tiene fuerza, batería para rato y ese sonido tan redondo que te llena la habitación. Si lo tuyo es más montar saraos grandes, no lo dudes: PartyBox 720 es la reina del fiestón. Y si simplemente buscas algo ligero, fácil de llevar y resistente a todo, el Grip es una cucada que suena mejor de lo que esperas por su tamaño.
Y lo mejor es que los tres comparten lo que más nos gusta de JBL: calidad, pegada, y sin complicarse la vida con conexiones raras. Todo es Bluetooth, todo funciona bien desde el móvil, y además ahora puedes emparejarlos con otros altavoces fácilmente gracias a Auracast, algo que antes solo veíamos en productos más caros.
Así que, si estás buscando renovar tu altavoz para otoño, para llevarlo a escapadas, fiestas, viajes o simplemente para montar un buen ambiente en casa… JBL se ha marcado un triple lanzamiento que tiene para todos los gustos. Y lo mejor es que no parece marketing: lo que prometen, lo cumplen. Eso sí, elige bien el tamaño, porque luego no hay quien lo devuelva cuando te das cuenta de que el PartyBox no cabe en el coche.