¿Sabes ese momento en el que acabas de estrenar tele nueva y, emocionado, pones Netflix para ver cómo se ve? Pues yo lo tengo clarísimo: antes de darle al play, lo primero que hago es cambiar el modo de imagen. Porque si hay algo que me pone nervioso, es ver una serie con los colores reventados, los blancos quemados y todo con ese brillo que parece que estás viendo una feria, no una película.
Y mira que me ha pasado veces. En casa de amigos, familiares, incluso en hoteles: en cuanto me doy cuenta de que la tele está en modo «Dinámico» o «Vívido», me dan ganas de esconder el mando. Es un festival de colores chillones, pieles naranjas y luces que te dejan ciego. ¿Qué sentido tiene eso si lo que quieres es disfrutar de una peli o una serie tal como se pensó en su día?
Por eso, después de mucho probar, fallar y volver a probar, llegué a una conclusión muy simple: hay solo tres modos de imagen que realmente valen la pena para ver Netflix como Dios manda. No necesitas más. No necesitas calibrar nada como si fueras técnico de Hollywood. Solo necesitas esto:
Modo Cine, Modo Filmmaker o Modo Estándar: así se ve Netflix como se debe
Después de muchos años viendo contenido en diferentes teles —y con varios modelos en casa, porque soy de los que no paran quietos—, estos son los únicos tres modos de imagen que uso para ver Netflix. Y sí, funcionan tanto si tienes una tele OLED de última generación como si estás con un LED de hace unos años.
1. Modo Cine o Película: el de toda la vida, pero sigue siendo el rey
Este es el clásico. El de los entendidos. Modo Cine (o Película, según la marca) es lo más parecido a cómo el director pensó su obra. No está sobreprocesado, no hay colores fluorescentes, y todo se ve más cálido, más natural. Es cierto que al principio puede parecer que la imagen es más «amarilla» o «apagada», pero no te asustes: es así como debe verse. Piénsalo como cuando ves una peli en el cine: los colores no te saltan a la cara, se sienten reales, orgánicos.
Además, este modo suele desactivar automáticamente esas funciones molestas como el suavizado de movimiento, que hacen que las películas parezcan telenovelas. Si quieres ver Stranger Things, Dark o El juego del calamar como se debe, este es tu modo.
2. Modo Filmmaker: para los puristas (o los que no quieren tocar nada)
Si tu tele tiene este modo, úsalo. Filmmaker Mode es como tener a un director gritándote: “¡Así es como quiero que veas esto!”. Literalmente fue creado por cineastas para que la imagen se mantenga tal cual fue pensada. No hay procesamiento extra, ni realce de bordes, ni suavizado de movimiento, ni saturación absurda.
Este modo es perfecto para ver Netflix sin complicarte la vida. No necesitas ajustar nada más, porque todo viene preparado de fábrica. Además, es ideal si compartes la tele con alguien que no quiere estar cambiando ajustes todo el rato. Pones Filmmaker y listo, a disfrutar.
3. Modo Estándar: cuando no tienes otra opción (pero quieres algo decente)
Vale, no todas las teles tienen Modo Cine o Filmmaker. A veces estás en una habitación de hotel, o con una tele más antigua, y lo único que puedes elegir es entre Estándar, Vívido o Dinámico. En ese caso, elige Estándar sin pensarlo dos veces.
No es perfecto, pero al menos no te arruina la imagen. Los colores están bastante equilibrados, el brillo es razonable, y con un par de ajustes puedes dejarlo más que decente. Si quieres ir un paso más allá, puedes entrar al menú y bajar un poco la nitidez, quitar el suavizado de movimiento y dejar la temperatura de color en “cálida”. Con eso, verás Netflix mejor que el 90% de la gente.
Y ya está. No hace falta complicarse la vida con calibraciones profesionales, ni tocar 20 menús distintos. Estos tres modos son todo lo que necesitas para ver Netflix con buena calidad de imagen y sin dolor de ojos.
¿Un último consejo? Evita a toda costa los modos «Dinámico», «Vivo», «Vívido» o como quieran llamarlos. Están pensados para las tiendas, no para tu salón. Te engañan con colores bonitos, pero al final estás viendo algo que no se parece en nada a la intención original.
Así que ya sabes: Cine, Filmmaker o Estándar. Solo esos. Elige bien el modo y la próxima vez que pongas Netflix, te prometo que vas a notar la diferencia. Y si no me crees, prueba cambiarlo mientras ves tu serie favorita. Luego me cuentas.