Llevamos ya unas cuantas semanas dándole caña al nuevo JBL Charge 6, y la verdad es que nos ha dejado muy buen sabor de boca. Si ya eras fan del Charge 5 (como lo éramos muchos), este nuevo modelo viene a mejorar lo que ya era bueno… y lo hace sin complicarse demasiado.
Lo hemos usado en casa, en la calle, en escapadas, en fiestas improvisadas, y sí, hasta en la ducha (que para algo tiene protección al agua). Spoiler: no solo aguanta el trote, sino que suena de lujo. JBL ha refinado la fórmula sin reinventarla, pero ha metido suficientes cambios para justificar el salto.
Y es que, sinceramente, el Charge 6 no es una revolución, pero sí una evolución muy acertada. ¿El resumen rápido? Más batería, mejor sonido, más opciones de conectividad y un diseño más práctico. Pero vamos paso a paso que hay tela que cortar.
Diseño y construcción: sigue siendo un tanque… pero ahora más listo
A primera vista, el JBL Charge 6 no parece muy distinto del Charge 5. Pero si te fijas con calma, hay detallitos que marcan la diferencia. Para empezar, los botones ahora están mejor colocados, en dos filas más intuitivas. Es una tontería, sí, pero se nota cuando usas el altavoz a oscuras o con prisas.
El cuerpo sigue siendo robusto, compacto y con ese rollo “todoterreno” tan JBL, pero ahora tiene una correa para transportarlo mucho más cómoda. ¡Por fin! Porque aunque sea portátil, no es precisamente mini, y ese asa hace que llevarlo del salón al jardín no sea un ejercicio de malabarismo.
Otra mejora importante: la resistencia al agua y al polvo sube de IP67 a IP68. En la práctica, esto significa que puedes meterlo en la arena o bajo la lluvia sin miedo. Incluso un buen chapuzón accidental no le va a afectar. Además, el tejido de la rejilla ahora es reciclado, lo cual también suma puntos.
JBL Charge 6: especificaciones técnicas
Característica | Detalle |
---|---|
Potencia | 40 W |
Bluetooth | 5.4 |
Alimentación | Solo batería (no funciona enchufado sin batería) |
Autonomía | Hasta 24 horas (hasta 28 horas con Playtime Boost activado) |
Funciones destacadas | Powerbank, compartición de audio vía Auracast, resistencia IP68, sonido sin pérdidas vía USB-C, AI Sound Boost, emparejamiento estéreo |
Conexiones | USB-C (para audio por cable y carga) |
Dimensiones (alto x ancho x fondo) | 9,8 x 22,9 x 9,8 cm |
Peso | 960 g (990 g con correa incluida) |
Colores disponibles | 7 acabados: Morado, Rosa, Azul, Negro, Rojo, Blanco y Squad (camuflaje) |
Características principales: más batería, más funciones, más JBL
Una de las grandes mejoras que hemos notado está en la autonomía. JBL promete hasta 24 horas de batería con uso normal, y si activas el modo Playtime Boost, puedes rascar hasta 28. Eso sí, este modo recorta un poco los graves, así que es útil si estás bajo mínimos y necesitas que dure lo máximo posible.
Otra función nueva que mola mucho es la conectividad Auracast. Puedes emparejar varios JBL Charge 6 (u otros modelos compatibles como el Flip 7 o el Xtreme 4) para crear un sistema de sonido brutal. Nosotros lo probamos con un Charge 6 y un Flip 7 y fue una fiesta total. Se sincronizan en segundos desde la app o tocando el botón correspondiente.
¿Y sabías que ahora puedes escuchar música por cable USB-C con calidad sin pérdidas? Sí, como lo oyes. JBL ha pensado en los más puristas (o simplemente en quienes quieren exprimir al máximo su suscripción a Tidal, Qobuz o Apple Music Hi-Res), y ahora puedes mandar audio en alta resolución de hasta 24-bit/96kHz directamente desde tu móvil, portátil o reproductor compatible.
La conexión es tan sencilla como enchufar un cable USB-C desde tu fuente al Charge 6 y pulsar el botón de reproducción mientras conectas el cable. Un pequeño tono sonoro te avisa de que se ha activado el modo de escucha por cable. Al hacerlo, el Bluetooth se desconecta para que no haya interferencias ni pérdidas de calidad.
Y aquí viene lo bueno: sí se nota la diferencia. Si eres de los que disfrutan escuchando los matices de una guitarra acústica, el reverb en una voz o las capas de una producción electrónica más compleja, vas a alucinar. El sonido gana en profundidad, precisión y silencio entre notas. No es una mejora sutil, es algo que de verdad transforma la experiencia de escucha.
Eso sí, JBL ya no incluye el cable en la caja (una pena, la verdad), pero cualquier cable USB-C de buena calidad te sirve. Y si tienes uno por casa (como el del móvil), lo puedes probar ahora mismo.
Además, como ya es tradición, el Charge 6 sigue funcionando como powerbank, por si necesitas darle un chute de batería al móvil cuando estás fuera de casa.
Calidad de sonido: esto ya suena serio
Vamos a lo que de verdad importa: ¿cómo suena este bicharraco? En una palabra: espectacular. JBL ha afinado el sonido para que sea más limpio, potente y definido, sin perder esa personalidad cañera que ya tenía el Charge 5.
El nuevo woofer y el tweeter hacen muy buen trabajo juntos. Los graves son potentes y profundos, pero sin comerse el resto de las frecuencias. Las voces se escuchan claras, con cuerpo, y los agudos tienen ese puntito brillante que te hace mover la cabeza sin querer.
Probamos desde reguetón hasta rock pesado, pasando por jazz, acústico y electrónica, y en todos los casos el altavoz respondió de maravilla. El algoritmo de AI Sound Boost analiza el audio en tiempo real para evitar distorsiones y mantener el sonido potente y equilibrado, incluso cuando le das caña al volumen.
Una de nuestras pruebas favoritas fue con “Not Like Us” de Kendrick Lamar, y madre mía… el ritmo, los graves, la pegada… parecía que estábamos en una mini disco. También le metimos “Blinding Lights” de The Weeknd y “Don’t Start Now” de Dua Lipa, y el Charge 6 respondió con energía, equilibrio y contundencia en los bajos sin saturar nada. Pero lo más interesante es que también sabe mimar temas más tranquilos: Nick Drake, Norah Jones o incluso una charla de podcast suenan cálidos, nítidos y con una buena sensación de espacio, sin perder ese toque envolvente que te mete en la historia o en la melodía.
Y si quieres una experiencia aún más rica, te recomendamos usar la conexión USB-C para audio sin compresión. Es otro rollo. Más detalles, más matices, menos ruido de fondo. Para un altavoz Bluetooth, eso es decir mucho.
Conclusiones y precio: el mejor Charge hasta la fecha
¿Vale la pena gastarse los 199,99 euros que cuesta el JBL Charge 6? La respuesta corta es: sí, absolutamente. La larga… aquí va.
Estamos ante un altavoz que mejora en todos los aspectos clave respecto a su antecesor: mejor sonido, más batería, más opciones de conectividad, más resistente, con funciones extra que de verdad se notan (como el Auracast o la conexión USB-C con audio en alta definición). JBL ha sabido evolucionar sin complicarse, manteniendo todo lo que funcionaba bien y añadiendo justo lo que hacía falta.
En nuestras semanas de uso, el Charge 6 se ha convertido en nuestro altavoz de cabecera, tanto para el día a día como para salidas, barbacoas, fiestas, o incluso para relajarnos con una lista de reproducción tranquila. Tiene ese punto de equilibrio entre potencia, claridad y portabilidad que hace que lo uses sin pensar… y eso es algo que no muchos altavoces consiguen.
Además, se nota que JBL ha escuchado a sus usuarios. La correa, la mejora en los botones, el extra de batería, la calidad sin pérdidas por USB-C… son detalles que marcan la diferencia, sobre todo cuando vas a usarlo durante años. No es un simple “más de lo mismo con otro color”, sino una versión pulida y afinada de un producto ya excelente.
¿Es caro? Depende. Por 199,99 euros, no es el altavoz más barato del mercado, pero en nuestra opinión, lo que ofrece compensa sobradamente la inversión. Si vas a usarlo mucho y te importa que suene bien de verdad, te va a durar y te va a hacer disfrutar. Y si pillas alguna oferta (que JBL suele hacer), es un auténtico chollo.
Eso sí, hay un detalle que no nos ha gustado nada, y es que JBL ya no incluye ni el cable de carga ni el enchufe en la caja. Entendemos que muchos ya tenemos cables por casa, pero en un producto de este precio, es un recorte un poco feo. No cuesta tanto incluir al menos el cable USB-C, sobre todo ahora que se usa también para el audio de alta fidelidad.
En definitiva, el JBL Charge 6 no solo mantiene el trono de los altavoces portátiles, sino que lo refuerza con mejoras reales y un sonido aún más maduro, potente y refinado. Si buscas un altavoz que suene increíble, que aguante el trote y que no se quede corto nunca, este es una apuesta segura.