Vamos a ponernos en situación. Quieres un altavoz portátil de los buenos, de los que aguantan lo que les eches, suenan bien en exteriores, tienen batería para días y encima te permiten cargar el móvil si hace falta. Y claro, miras el escaparate y hay dos que te miran de frente: el JBL Charge 6 y el Sony ULT Field 3. Ambos han salido hace poco, ambos cuestan menos de 200 euros… y ambos están pensados para durar, sonar fuerte y acompañarte a la piscina, a la montaña o al balcón de casa.
La cosa es que, aunque parezcan parecidos, cada uno tiene sus manías, sus virtudes y sus límites. JBL viene con lo último en conectividad, sonido personalizable y funciones nuevas como el audio sin pérdidas por USB-C. Sony, por su parte, lo apuesta todo al modo ULT, un refuerzo brutal de graves que hace que todo suene con garra y contundencia nada más sacarlo de la caja. Vamos, que aquí no es cuestión de cuál es mejor, sino de cuál encaja contigo.
Así que si estás dudando entre uno u otro, aquí te lo contamos todo: desde la calidad de sonido, la autonomía real, las apps, la resistencia, cómo se emparejan, qué tal son las apps, qué puedes tocar… y sobre todo, cómo suenan y cómo se sienten. Vamos con la comparativa completa, con todo el estilo de la casa.
Diseño, resistencia y portabilidad: ¿cuál aguanta más trote?

Tanto el JBL Charge 6 como el Sony ULT Field 3 siguen una filosofía muy parecida: altavoces portátiles pensados para durar y sonar fuerte en exteriores, con acabados robustos y protección contra polvo, agua y golpes.
El Charge 6 mantiene su clásica forma cilíndrica, pero ahora con una base más estable (¡por fin!) y una asa desmontable que puedes convertir en lazo de transporte. Pesa algo más de un kilo, aunque sigue siendo muy manejable para su tamaño. Por su parte, el Sony ULT Field 3 es algo más grande y pesado (1,2 kg), con un diseño más rectangular y una correa de hombro ajustable que se agradece cuando lo llevas de paseo o a la playa.
En cuanto a resistencia, JBL va un paso por delante con su certificación IP68, lo que significa que aguanta agua y polvo sin despeinarse, incluso si se te cae al suelo. Sony se queda en IP67, que sigue siendo excelente, pero no tan extrema. Eso sí, el ULT también presume de ser antigolpes, antioxidante y con resistencia militar (certificado MIL-STD-810H), lo que tampoco está nada mal.
Controles, apps y funciones: ¿mejor Auracast o Party Connect?

Ambos altavoces tienen controles físicos muy accesibles, situados en la parte superior. JBL divide sus botones en dos zonas: una para encendido, Bluetooth y Auracast, y otra para los clásicos de reproducción. Puedes pasar de canción con doble o triple pulsación, algo que el Sony no permite (ahí solo tienes Play/Pause y subir/bajar volumen, además del botón ULT para activar ese modo de graves).
La app también marca diferencias. Con el Sony Sound Connect puedes elegir entre modo de calidad o de conexión estable, tocar un ecualizador de 7 bandas, emparejar con otro ULT y actualizar firmware. El problema es que no puedes usar la ecualización y el modo ULT a la vez, lo que limita bastante la personalización.
JBL lo hace mejor aquí. Su app JBL Portable te permite ajustar el sonido con total libertad, tienes varios perfiles predefinidos, acceso al modo Playtime Boost para alargar la batería, y el nuevo sistema Auracast, que reemplaza al viejo PartyBoost. Eso sí, Auracast no es compatible con altavoces JBL anteriores, algo a tener en cuenta.
En cuanto a conexiones, Sony ofrece multipoint real (dos dispositivos conectados a la vez), mientras que en el JBL depende del comportamiento según dispositivo y firmware: algunos usuarios lo consiguen, pero no es una función oficialmente destacada.
Conectividad, batería y sonido: diferencias más importantes

En conectividad Bluetooth, Sony monta Bluetooth 5.2, y JBL sube a Bluetooth 5.4. Nada grave, pero JBL va algo más allá.
Y aquí llega uno de sus grandes puntos fuertes: el Charge 6 permite reproducir audio digital por USB-C, incluyendo música sin pérdidas desde servicios como Tidal o Apple Music. Esto es un salto importante para quien quiere calidad sin depender del Bluetooth. Ambos altavoces permiten también usar el USB-C como powerbank, para cargar tu móvil u otro dispositivo.
En autonomía, empate técnico: Sony promete 24 horas reales incluso con el modo ULT activado, mientras que JBL llega a 28 horas combinando 24 horas estándar más 4 horas extra con el modo Playtime Boost (a costa de sacrificar algo de graves). Y si hablamos de carga rápida, JBL gana por poco: 10 minutos de carga te dan 150 minutos de reproducción, frente a los 122 minutos que ofrece Sony.
Y en calidad de sonido… depende. El Sony ULT Field 3 apuesta por el modo ULT, que refuerza los graves y da un sonido muy completo sin tocar nada, pero que no permite usar ecualizador al mismo tiempo. El Charge 6, en cambio, suena más neutro, aunque según análisis publicados, subir ciertas frecuencias resuelve sin problemas esa falta de brillo inicial.
Según las mediciones MDAQS, el Sony obtiene una puntuación general de 3.4, mientras que el JBL se queda en 2.7. Sony gana en timbre e inmersión, y ambos están igualados en distorsión.
Antes de cerrar, un repaso rápido a las especificaciones clave, porque aquí también hay diferencias importantes que conviene tener claras:
- JBL Charge 6: configuración de woofer + tweeter con radiadores pasivos, códecs SBC/AAC (según especificaciones publicadas en análisis), batería de hasta 28 horas (24 horas reales + 4 horas con Playtime Boost), audio digital por USB-C, powerbank integrado, certificación IP68, y app completa con ecualizador libre.
- Sony ULT Field 3: altavoz de dos vías con radiadores pasivos, códecs SBC/AAC, hasta 24 horas reales incluso con el modo ULT activo, micrófono integrado para llamadas, multipoint, powerbank por USB-C, certificación IP67 con resistencia a golpes, y app con ecualizador limitado al no poder usarlo junto al modo ULT.
No son cifras que cambien la experiencia por sí solas, pero ayudan a entender por qué cada uno apunta a un tipo de usuario distinto.
¿Cuál me compro entonces?
Aquí no hay una respuesta única, pero te doy mi opinión sincera, tras revisar especificaciones y análisis de referencia.
Elige el JBL Charge 6 si quieres:
- IP68 y mejor resistencia al agua y polvo
- Mejor batería (con opción Playtime Boost)
- Audio por USB-C sin pérdidas
- Ecualizador completo sin limitaciones
- App más pulida y con más ajustes
Elige el Sony ULT Field 3 si quieres:
- Más graves nada más encenderlo
- Correa de hombro para llevarlo cómodamente
- Multipoint y manos libres integrado
- Un sonido potente sin tocar nada (modo ULT)
- Diseño más sólido y con estética Sony clásica
Dos grandes opciones, cada una con su estilo

Ambos altavoces son una apuesta segura si buscas un altavoz portátil que lo aguante todo, con buena autonomía, sonido contundente y funciones extra. El JBL Charge 6 es más redondo si valoras la personalización, la conectividad moderna (Auracast, audio por USB, EQ avanzada), y tener un sistema flexible. Es el altavoz más versátil de los dos.
El Sony ULT Field 3, en cambio, es ideal si quieres enchufar, darle al botón ULT y olvidarte. Tiene un sonido más directo, más contundente de fábrica, y algunas funciones extra que se agradecen, como la correa o el multipoint.
Como siempre, hablamos desde especificaciones, análisis publicados y experiencia acumulada con gamas anteriores, no desde una prueba directa de estos modelos concretos.
¿Lo mejor? Que con cualquiera de los dos vas a sonar fuerte, claro y durante horas, estés donde estés. Y eso, al final, es lo que importa en un altavoz portátil.




