Si eres de los que disfruta una buena serie, peli o partidazo en pantalla grande, ojo porque Philips viene fuerte. La marca acaba de presentar dos nuevos proyectores dentro de su gama NeoPix: el NeoPix 150 y el NeoPix 450 Smart. Y sí, lo sé, hay un montón de proyectores en el mercado, pero estos dos tienen muy buena pinta… sobre todo porque no cuestan un riñón.
Lo mejor es que Philips ha pensado en todo el mundo: si quieres algo sencillo y barato, tienes el NeoPix 150; si prefieres algo más completo y conectado, el NeoPix 450 Smart te lo pone fácil. Los dos vienen con resolución Full HD de verdad (nada de trucos raros), tamaños de proyección que van desde 80 hasta 100 pulgadas y, sobre todo, con precios que invitan a probarlos.
Yo, que soy de los que se monta “mini-cines” improvisados en el salón, ya te digo que aquí Philips lo ha hecho bien. Un modelo es portátil y práctico para llevártelo a donde quieras, y el otro es una bestia para los que quieren streaming, brillo y mejor sonido. Te cuento todo en detalle, porque tienen mucha chicha.
Philips NeoPix 150: ligero, portátil y pensado para improvisar
Este NeoPix 150 me ha llamado mucho la atención porque pesa solo 1 kilo. Literalmente, lo puedes llevar en la mochila tranquilamente. Además, trae un soporte giratorio de 180° que te deja apuntarlo a la pared, al techo o a cualquier superficie plana. O sea, que puedes montar tu “cine” en la habitación, la terraza o incluso la cocina si te da el punto.
Aunque es pequeñito, no te creas que es un juguete. Lleva un panel Full HD 1080p real y te da hasta 80 pulgadas de imagen con 250 ANSI lúmenes. No es para ver pelis a pleno sol, pero para sesiones nocturnas o habitaciones con poca luz… va sobrado. Además, tal y como comenta la marca la lámpara LED dura 30.000 horas, así que te olvidas de cambiarla durante años.
Otra cosa que me gusta: viene bien servido de conexiones. Tiene USB-C, HDMI y USB, así que puedes enchufarle el portátil, la consola, el móvil o incluso un stick tipo Fire TV o Chromecast. Y lo mejor es que, según la marca, es silencioso. Habrá que ver si es así, porque no sé tú, pero yo odio esos proyectores que parecen un secador de pelo.
Philips NeoPix 450 Smart: más brillo, más pulgadas y Google TV integrado
Ahora bien, si quieres algo más completo y sin líos, aquí es donde entra el NeoPix 450 Smart. Este es el modelo “tope de gama” y, para mí, el más interesante. ¿Por qué? Porque viene con Google TV integrado. Esto significa que no necesitas conectar nada extra: lo enciendes y ya tienes Netflix, Disney+, Prime Video, HBO Max y compañía listos para darle caña. Eso sí, habrá que ver qué tal se mueve el sistema, porque en algunos proyectores de este rango de precio Google TV puede ir un poco justo.
Aquí la experiencia es bastante diferente. Llega hasta 100 pulgadas con 500 ANSI lúmenes, así que la imagen es más brillante y viva incluso si no tienes la habitación totalmente a oscuras. Eso sí, hay que tener en cuenta que 500 lúmenes no hacen milagros: para sacarle todo el partido, lo ideal será usarlo en habitaciones poco iluminadas. Además, incluye autoenfoque, corrección automática de la imagen y ajustes avanzados. Vamos, que literalmente lo colocas, lo enciendes y en segundos ya está todo perfectamente alineado.
El sonido lo ponen dos altavoces de 5W, que según Philips deberían ser suficientes para ver pelis o series sin problemas. Eso sí, hasta que lo probemos, mejor no poner la mano en el fuego. Por suerte, si buscas más potencia, puedes conectarlo fácilmente por Bluetooth 5.0 o Wi-Fi 6 a una barra de sonido, altavoces externos o incluso auriculares inalámbricos. Además, también trae screen mirroring, así que puedes enviar cualquier vídeo o foto desde el móvil. Un puntazo.
Precios, cuál elegir y mi opinión
Y vamos a lo que importa: los precios. El Philips NeoPix 150 llega por 169 euros, mientras que el NeoPix 450 Smart se queda en 395 euros. Visto lo que ofrecen, la verdad es que no están nada mal.
Si eres de los que solo quiere algo sencillo, barato y portátil, el NeoPix 150 es tu proyector. Pero si buscas una experiencia más completa, con Google TV integrado, más brillo, mejor sonido y cero cables, entonces el NeoPix 450 Smart es claramente la apuesta ganadora.
La jugada de Philips está clara: quieren que montes tu propio cine en casa sin gastar una fortuna. Sobre el papel, parece que han hecho los deberes: dos proyectores compactos, fáciles de usar, con buena pinta y precios bastante ajustados. Ahora solo falta ver cómo rinden en el día a día… y, mientras tanto, ir preparando las palomitas.