Si tienes un sistema HiFi o estás pensando en montar uno, quizás te preguntes cómo conseguir un gran sonido. Pero, ¿qué es un realmente un buen sonido? Muchos audiófilos definen un «sonido excepcional» como una experiencia de audio que sea capaz de hacer creer al oyente que tiene a los artistas e instrumentos en su sala. Y una forma de lograrlo es mediante la imagen estéreo.
Por supuesto los equipos que elijamos afectan mucho a la calidad, pero siempre hemos dicho que no hace falta gastar miles y miles de euros en hardware para lograr un buen sonido. Y también hemos comentado muchas veces que existen formas de mejorar el sonido con simples cambios, como la decoración de la sala, la ubicación de los altavoces y otros. Pero en esta ocasión os vamos a hablar de la imagen estéreo.
¿Qué es la imagen estéreo?
Que simple y al mismo tiempo complicada pregunta. Una forma simple de definirla es como la capacidad de los altavoces y el sistema de sonido de crear un escenario sonoro uniforme, a diferencia del sonido que proviene de dos altavoces colocados frente al oyente. Es decir, con una imagen estéreo precisa, los altavoces deberían desaparecer acústicamente y, en su lugar, escuchar los instrumentos y las voces a los lados, delante, detrás y alrededor de la sala de escucha, como si los sonidos provinieran de puntos específicos en el espacio.
Esto no es nada sencillo en realidad. Los altavoces solo pueden lograr una imagen estéreo adecuada si son precisos, ya que la precisión crea sincronización, lo cual es crucial para reproducir una imagen estéreo impecable.
Los altavoces no solo deben ser fieles al material fuente en cuanto a precisión tonal, sino que los drivers y los filtros de cruce también deben funcionar en perfecta armonía para crear la ilusión de una escena sonora fluida y sin interrupciones. Sin una precisión milimétrica, la escena sonora puede parecer distorsionada y la ubicación de las voces e instrumentos confusa.
La ubicación de los altavoces es otro factor importante para lograr una imagen estéreo adecuada. Esto incluye la distancia a las paredes y la posición principal de escucha, factores que pueden alterar la percepción de la imagen estéreo. Un par de altavoces que trabajan en perfecta armonía, con una ubicación óptima en el escenario, son capaces de ofrecer sonidos provenientes de diferentes puntos del espacio con distintos grados de impacto.
En un sistema de dos canales de alto rendimiento, los altavoces izquierdo y derecho reproducen las capas de instrumental, voz y efectos de sonido individualmente a niveles de volumen precisos y variables. La precisión y la correcta ubicación de los altavoces revelan la ubicación exacta de los diferentes instrumentos y voces, lo que proporciona una sensación de ubicación en el escenario sonoro tal como la concibió el ingeniero de grabación.
Unos altavoces configurados para lograr una imagen estéreo correcta deberían ser capaces de presentar cada instrumento y voz de manera que sea fácilmente discernible, con una dinámica nítida y bien definida y una respuesta de frecuencia precisa, para que el sonido permanezca transparente sin enfatizar demasiado los graves «retumbantes» o las frecuencias altas «brillantes».
Los canales izquierdo y derecho de los altavoces deben ofrecer una salida equilibrada para una escucha amplia y generosa. Además, debe existir un ambiente natural alrededor de cada instrumento, donde la dinámica pueda desarrollarse, haciéndolos sonar más realistas y con más cuerpo. En definitiva, todas las capas de sonido deben integrarse de forma fluida y cohesiva, hasta el punto de resultar tan inmersivo que nos olvidemos de que los altavoces están funcionando.
Quizás estéis pensando que esto de la imagen estéreo es algo que solo los audiófilos con el oído más experimentado notarán. Pero no es así, una imagen estéreo precisa es clave para cualquiera que quiera sacar el máximo partido a su equipo. Y no solo para escuchar música, ya que el audio del cine en casa también se beneficia. Escuchar los efectos de sonido provenientes de puntos específicos del espacio en lugar de donde estén localizados los altavoces consigue sumergirnos en la acción de la película o serie de una forma verdaderamente única.
Así que, tal y explican en SVS, para conseguir un sonido excepcional debemos tener muy en cuenta el concepto de imagen estéreo, tanto si estamos utilizando un par de altavoces pasivos, como unos altavoces activos o incluso también con un sistema de cine en casa.
