Hoy os traemos una oferta de las que cuesta dejar pasar, especialmente si estás pensando en cambiar de tele y buscas algo que combine buena imagen, rendimiento brutal y un precio bastante ajustado para lo que ofrece. Porque sí, sabemos que hay muchas teles en el mercado, pero pocas ofrecen lo que da esta TCL C7K de 65 pulgadas, y menos aún con el precio que tiene ahora mismo.
¿Dónde está el truco? Pues ninguno. La tienes en Worten a 1.029 euros (precio habitual de 1.199 euros), y además TCL te devuelve 100 euros si rellenas un formulario muy sencillo en su web. Vamos, que te la acabas llevando por solo 929 euros. Una ganga total, sobre todo si tienes en cuenta las características que trae bajo el brazo este modelo que viene pisando fuerte.
TCL C7K de 65 pulgadas
Así que si estabas esperando el momento perfecto para hacerte con un televisor Mini LED de nueva generación, con lo último en tecnología de imagen, paneles con cientos de zonas de atenuación local y un brillo digno de cine, este es el momento y el modelo. Porque por menos de 1.000 euros, es difícil encontrar algo que le plante cara.
Características de la TCL C7K: un televisor de los que impresionan
Os vamos a resumir todas las características que incluye la nueva TCL C7K, pero lo mejor para conocerla a fondo es que echéis un vistazo a nuestras primeras impresiones de este modelo. Estamos ante un televisor que viene a sustituir a la exitosa gama C805, pero que ha sido muy mejorado en varios apartados clave. Para empezar, cuenta con un panel HVA, un filtro antirreflejo bastante decente y un sistema de retroiluminación Full Array con hasta 1008 zonas, que es una pasada.
Pero eso no es todo. Aquí también entra en juego la tecnología Mini LED, junto con los famosos Quantum Dots, que le dan unos colores espectaculares. El brillo tampoco se queda corto: hablamos de hasta 1.500 nits calibrados, lo que se traduce en una imagen vibrante tanto en escenas oscuras como en exteriores luminosos. Y ojo al detalle: incorpora microlentes en sus LEDs, lo que le permite hacer un control súper preciso del blooming, gracias al algoritmo de luz dinámica Micro OD de TCL.
Según la propia marca, con su sistema All-domain Halo Control, han conseguido un control brutal desde la fuente de luz hasta el panel, gracias a chips emisores de luz de alta eficiencia, tecnología de lentes propia, paneles HVA de gama alta y algoritmos de sombras y luces. ¿El resultado? Una imagen de cine, sin halos molestos y con un contraste que sorprende incluso en condiciones complicadas.
Y como no podía ser de otra forma, también se ha pensado en los gamers. La C7K soporta 144 Hz nativos en 4K, algo que muy pocas teles de esta gama pueden ofrecer. Esto mejora muchísimo la fluidez en juegos rápidos y la nitidez en movimiento. Y claro, viene con el procesador AiPQ Pro, que trabaja en segundo plano mejorando el contraste, el color, la nitidez y hasta el HDR en tiempo real con Inteligencia Artificial.
En cuanto a compatibilidades, no se le escapa ni una: Dolby Vision IQ, HDR10+, HLG, IMAX Enhanced… lo tiene todo. Y el sonido tampoco se queda atrás, ya que TCL se ha aliado nada menos que con Bang & Olufsen para firmar el sistema de audio. Este incluye Beosonic, una interfaz táctil que permite ajustar el sonido al vuelo según tu estado de ánimo, con unos algoritmos que lo hacen sonar espectacular.
Por último, pero no menos importante, viene con Google TV como sistema operativo, varios puertos HDMI 2.1, una Game Bar súper completa para ajustes en tiempo real y altavoces que dan la talla sin necesidad de barra de sonido (aunque si le pones una barra de sonido notarás la diferencia). Todo esto, insistimos, por solo 929 euros si aprovechas el reembolso de TCL. Una auténtica locura si estabas buscando tele nueva sin dejarte el sueldo del mes.
TCL C7K de 65 pulgadas
¿Nuestra recomendación? Si quieres una tele con panelazo, buena para cine, series y juegos, con tecnología de 2025 y a precio rebajado, esta es la tuya. Porque con todo lo que trae y este precio final, la TCL C7K es de lo mejorcito que puedes comprar ahora mismo. Corre que vuelan.
