Habréis visto muchas veces en nuestras reviews de televisores que hablamos del banding, concretamente refiriéndonos al banding de color (ya que existe otro defecto de imagen con el nombre de banding que hace referencia a la uniformidad del panel) y que, si seguís AVPasión, os habréis dado cuenta que es uno de los defectos que más pueden degradar la calidad de imagen final…y si, tiene «solución» o al menos unas especies de parches para evitarlo en la mayoría de situaciones.
Este fenónemeno no obedece una tecnología en concreto, si no que se puede producir -y se produce, de hecho- en cualquier tipo de televisor. Eso si, por lo que hemos estado viendo a lo largo de estos años de experiencia, es mucho más probable que lo veamos en televisores de gama media o gama baja, ya que los paneles son de peor calidad y los procesadores no cuentan con algoritmos para mejorarlo.
¿Qué es el banding de color? un problema cuyo origen encontramos en la cadena creador-consumidor
Como indica el titular, este problema radica en una cadena ya que el principal culpable es tanto el creador del contenido (una demo, una película, una serie, etc.) como el propio televisor. Me explico: si el contenido ya tiene banding, si el televisor lo muestra tal cual será filedigno al contenido original (aunque se puede mitigar, como veremos luego). Sin embargo, puede ocurrir que el contenido no tenga banding y el televisor lo muestre.
El banding de color ocurre debido al redondeo que se realiza en contenido digital, ya que éste lo que hace es aproximarse al valor del siguiente píxel. Por ejemplo, en la foto de arriba fijaos en el color púpura/azulado señalado con la flecha: cada píxel se fija en el siguiente (y anterior) y muestra un color lo más cercano posible a ellos…pero cuando no hay suficiente información, el cambio es demasiado brusco y se produce una tonalidad diferente que nosotros podemos percibir.
Esa falta de información se define por la profundidad de bits que tiene el contenido además de nuestro televisor. Por ejemplo, si vemos una película con una profundidad de 8 bits (lo que se usa en los Blu-rays o en programas de televisión en directo, por ejemplo) y nuestro televisor es de 10 bits, estaremos limitados igualmente a 8, ya que el contenido lo limita. Si fuera al revés, exactamente igual. Y 8 bits…son pocos para el color por lo que podremos ver banding de color con facilidad.
¿Se puede mitigar el banding de color en mi televisor? sigue estos 3 trucos para mejorarlo
Sin duda, podemos hacer varias cosas para mejorar este indeseable defecto. El primer consejo que te doy es el más obvio de todos pero también el más efectivo que vas a encontrar…y es que uses contenido de la máxima calidd posible, sin compresión de ningún tipo. Si pueden ser discos UHD o archivos de alta calidad (como los que ofrece Sony Pictures Core por ejemplo), mucho mejor, ya que éstos vienen sin compresión en el color y usan una profunidad de color de 10 bits (aunque es cierto que codificados a 4:2:0, pero eso es otro tema).
El segundo consejo importante es que uses siempre los modos de imagen correctos, ya que los modos IA, Vívido, Deportes y demás presets predefinidos lo único que harán es exagerar aún más el problema, dado que resaltarán todo a lo bestia: la nitidez, el movimiento, la luminosidad…y el color, acentúando aún más el problema de base.
Y el tercero es para aquellos que dispongan de un televisor de cierta gama y es que existe una tecnología (inventada por Sony, por cierto), que se encarga de mitigar el banding de color haciendo lo mismo que hace la profundidad del color pero bien hecho: analiza cada píxel y en lugar de mostrarlo con un color aproximado, hace una transición entre el color anterior y el siguiente para mostrar gradaciones mucho más suaves.
Hoy en día la tienen ya varios fabricantes y suele llamarse Gradación Suave o Mejora de gradientes o Gradientes suaves o algo por el estilo. Veréis que tiene varios niveles, pues nunca debéis pasar del Mínimo, ya que aunque mejorará aún más el banding…también nos quitará nitidez y detalle fino de la imagen, por lo que es peor el remedio que la solución.
