Todavía estamos con la resaca del Apple Event de ayer y, aunque todos los focos se los han llevado los nuevos iPhones, hay un detalle que quizá ha pasado más desapercibido pero que, ojo, puede cambiar la experiencia de uso para muchísima gente. Y no hablo de cámaras, ni de chips más potentes, ni de la típica subida de brillo en la pantalla. Hablo de algo mucho más “invisible”: Apple ha añadido en el iPhone 17 Pro la opción de desactivar el dichoso parpadeo del panel OLED.
Sí, has leído bien. Por primera vez en la historia del iPhone, el usuario podrá decirle al teléfono que deje de usar PWM (Pulse Width Modulation) para regular el brillo y que, en su lugar, emplee un método alternativo que no provoca ese molesto flicker que tantos dolores de cabeza da —literalmente— a mucha gente. Si eres de los que acaba con los ojos cansados, mareos o incluso migrañas después de usar el móvil un rato, esta noticia te va a sonar a gloria bendita.
Y lo más curioso es que este tema lleva años coleando. Los foros tecnológicos están llenos de hilos con usuarios quejándose de que los iPhones OLED (desde el X en 2017) les daban molestias visuales por culpa del PWM. Hasta el punto de que había gente que prefería quedarse en un iPhone LCD antes que dar el salto a OLED. Pues bien, Apple ha tardado siete años, pero al fin ha escuchado a esa parte de la comunidad.
Qué es el PWM y por qué da tantos problemas

Antes de seguir, conviene explicar en dos frases qué demonios es el PWM. Básicamente, cuando subes o bajas el brillo en una pantalla OLED, hay dos formas de hacerlo: o bien ajustas la corriente directamente (lo que se conoce como DC dimming), o bien apagas y enciendes los píxeles a gran velocidad. La segunda opción es más barata y sencilla de implementar, y esa es la que usa Apple desde siempre.
El truco funciona porque el ojo humano interpreta esa secuencia de encendidos y apagados como si fuese un nivel de brillo más bajo. El problema es que, aunque muchos no lo noten conscientemente, ese parpadeo existe. Y en personas sensibles puede traducirse en fatiga visual, mareos o dolores de cabeza. Cuanto más bajo pongas el brillo, más largo es el tiempo en que los píxeles permanecen apagados, y más acusado es el efecto.
Si alguna vez te ha pasado que al apartar la vista del móvil ves como unas ondas diagonales durante unos segundos, que sepas que eso es precisamente el PWM jugando con tu vista. Y ojo, no es un invento de cuatro frikis en Reddit: hay estudios médicos que relacionan directamente el parpadeo de las pantallas con molestias oculares.
La solución: DC dimming en el iPhone 17 Pro
Pues aquí llega lo interesante: con iOS 26, Apple ha escondido en los ajustes de accesibilidad una nueva opción llamada literalmente “Desactivar modulación por ancho de pulso”. Vamos, que podrás apagar el PWM y dejar que el brillo se gestione por corriente directa (DC dimming). El resultado: una pantalla sin parpadeo en ningún nivel de brillo.
Eso sí, Apple avisa en la descripción de que puede haber alguna pérdida de calidad en brillo muy bajo, ya que el PWM tiene la ventaja de mantener el color y la temperatura estables aunque la pantalla esté casi a oscuras. Pero vamos, entre eso y acabar con dolor de cabeza, creo que la mayoría lo tiene bastante claro.
De momento, la función está confirmada para el iPhone 17 Pro y el 17 Pro Max, aunque no se descarta que también llegue al iPhone 17 “normal” y al iPhone Air. Habrá que esperar al 19 de septiembre, fecha oficial de lanzamiento, para comprobarlo en persona.
Por ponerlo en contexto, Google ya intentó algo parecido en el Pixel 10, pero allí lo único que puedes hacer es subir la frecuencia del PWM a 480 Hz. Es decir, el parpadeo sigue existiendo, solo que más rápido y menos perceptible. Apple, en cambio, ha ido un paso más allá y directamente te deja apagarlo.
Una mejora invisible, pero importantísima
Lo gracioso es que esta novedad no tiene la espectacularidad de decir “tenemos 2000 nits de brillo” o “hemos subido el zoom de la cámara”. Sin embargo, para los que sufrían con el PWM, esta será probablemente la mejora más importante en años. Porque hablamos de poder usar el móvil sin acabar con migrañas, de poder leer en la cama con el brillo al mínimo sin que te den ganas de tirar el iPhone por la ventana.
Al final, los iPhone 17 traen muchas cosas chulas: todos con pantallas OLED de 120 Hz, nuevo procesador, cámaras renovadas… pero esta función puede marcar un antes y un después en cómo perciben el iPhone los usuarios más sensibles. A veces, lo que parece un simple “detalle técnico” acaba siendo el cambio que más calidad de vida aporta en el día a día.
Yo, sinceramente, lo celebro. Me parece un ejemplo de cómo Apple, aunque tarde, sabe escuchar a su comunidad. Y quién sabe, igual dentro de unos años nos preguntamos cómo demonios hemos podido vivir tanto tiempo con pantallas que parpadeaban delante de nuestros ojos sin que nadie hiciera nada.