Como he comentado en varias ocasiones, soy una persona que ve mucho contenido en plataformas de streaming, pero tengo un placer culpable bastante curioso: las series de médicos. He visto de todo tipo, desde clásicos atemporales como Anatomía de Grey o House, hasta series más modernas que realmente han conseguido abrirse un gran hueco, como The Good Doctor, pasando otras series menos reconocidas pero que también deberías ver si tienes la oportunidad, como puede ser The Resident.
Aun así, en este caso no me toca hablar de ninguna de estas, y la verdad es porque en este momento es mejor hablar de Respira, una serie española que se estrenó originalmente durante el pasado año 2024, consiguiendo enamorar a la crítica y al público desde un primer momento, y la verdad es que personalmente estoy realmente de acuerdo.
Una de las mejores series de médicos

Esta clase de series de médicos suelen apostar por enfoques diferentes. Algunas de ellas se centran en los médicos como figura protagonista, mientras que otros ponen al frente a la medicina como tal, dejando de lado la figura de los practicantes de la mismas, mientras que me he encontrado casos en los que el hospital mismo actúa como una especie de figura literaria que engloba todas las tramas, y que no solo está de fondo. Aun así, quizá el caso más curioso que me he encontrado es el de Respira, que apuesta por un enfoque bastante diferente.
En ella la medicina vuelve a estar en un segundo plano, y los médicos como tal no son lo más importantes, sino que la trama está al servicio de la realidad. Respira es una crítica al sistema de salud público español, algo que también suele ser un tema de fondo en las series estadounidenses con su propio sistema de salud, pero que normalmente se deja de lado. En este caso, al menos en su primera temporada, todo gira en torno al clima que se respira respecto a la sanidad pública, y más concretamente se alza como una crítica clara al uso partidista que se suele hacer de ella.
Este es sin duda el eje central de una trama que está bien asentada, pero que también busca tratar otros temas de mucha importancia, pero siempre con un hilo conductor: la realidad social española. Cierto es que igualmente hay espacio para desarrollar a los personajes y sus relaciones, y también vemos alguna que otra operación y situaciones en las que se practica la medicina como tal, pero al final de cuenta esto pasa a un segundo plano, en pos de un guion que quiere enfocarse en lo que sus escritores consideran lo más importante.
En cualquier caso, y más allá de esto, que ya la hace especialmente interesante, es una serie que con su primera temporada consiguió engancharse. No es que sea disruptiva ni mucho menos, pero toma lo más interesante de las series de médicos clásicas, lo une a los dramas españoles, para crear una especie de híbrido que realmente funciona, algo que ni si quiera soy capaz de explicar. Además, es capaz de aprovechar su reparto tan sólido, incluyendo a Manu Ríos como protagonista de la misma y a Najwa Nimri como una especie de antagonista que funciona más que bien en este contexto.

¿Debería verla?
Como comentaba, ya se ha estrenado su segunda temporada, y aunque por ahora no puedo hablar de ella, la verdad es que si puedo confirmar que su primera temporada consiguió enamorarme, y espero que esta segunda también lo haga. Es una serie diferente, que apuesta por un estilo más propio y menos médico de lo que muchos estamos acostumbrados, pero que realmente funciona, y por eso mismo la recomiendo sin ninguna duda. Si estás dispuesta a buscar enfoques nuevos en este género manido, quizá te interese ver Respira.
Si quieres ver Respira puedes hacerlo ya en Netflix.




