Hay tocadiscos que son bonitos, otros que suenan bien… y luego están esos pocos que parecen sacados de un sueño analógico. El nuevo Pro-Ject Signature 12.2 entra de lleno en esa categoría, y no lo decimos solo por su precio, que ya de por sí lo sitúa en la élite, sino por todo lo que representa: una obra de ingeniería, diseño y mimo por el detalle que va directa a conquistar a los amantes del vinilo más exigentes.
Y no viene solo. Pro-Ject también ha aprovechado para lanzar The Classic Reference, otro giradiscos de gama alta que, si bien es más contenido en precio, hereda muchas ideas de modelos icónicos de la marca. Ambos modelos se presentaron el año pasado, pero ahora ya están disponibles para comprar en Europa. Y llegan con ese sello de calidad artesanal que tanto gusta en el mundillo hi-fi: hechos a mano en Europa, con piezas pulidas a mano, ajustes milimétricos y tecnología que mezcla lo clásico con lo más avanzado.
Lo mejor de todo es que, aunque su diseño es espectacular y parecen pensados para brillar en cualquier salón o sala de escucha, no son simples objetos decorativos. Todo lo contrario: Pro-Ject ha puesto toda la carne en el asador para que estos giradiscos suenen como los ángeles, desde el brazo hasta el plato, pasando por la suspensión y la alimentación. Vamos, que no son solo “bonitos y caros”, sino que apuntan muy alto en lo que importa: el sonido.
Signature 12.2: un tocadiscos de más de 100 piezas que busca la perfección
Empezamos por el plato fuerte, nunca mejor dicho. El Pro-Ject Signature 12.2 es el nuevo buque insignia de la marca austríaca, y según ellos mismos, es el giradiscos más avanzado que han construido jamás. No es para menos: está hecho con más de 100 piezas mecanizadas por CNC, todas metálicas y pulidas a mano durante dos días completos. Vamos, que casi puedes verte reflejado en él antes de poner el vinilo.
El chasis está fabricado en MDF, pero ojo, no es un MDF cualquiera. Va lacado a mano en negro piano, con nada menos que 10 capas, y con bordes redondeados que no solo le dan elegancia, sino que también ayudan a reducir ondas estacionarias y resonancias indeseadas. A eso le sumas una base con pies ajustables, cónicos y con muelles internos, y te queda claro que aquí no hay nada dejado al azar.
El plato de aluminio pesa 10,5 kg y también está mecanizado al milímetro. Encima lleva una alfombrilla hecha de vinilos reciclados, una curiosidad que le da un puntito eco-friendly. Pero no es solo estética: el conjunto se equilibra con un cojinete cerámico invertido con soporte magnético, lo que permite una rotación ultrasuave y silenciosa. Una auténtica pasada para los que buscan precisión absoluta.
En cuanto al brazo, nos encontramos con una joyita de 12 pulgadas en aluminio, con un sistema de pivote de tres puntos que mejora la estabilidad y reduce la fricción. Todo pensado para sacar hasta el último matiz de tus discos. Eso sí, no es barato: 11.999 euros en España. Pero claro, esto no es para cualquiera. Esto es para los que viven el vinilo como una religión.
The Classic Reference: lo mejor de varios mundos, con un toque más “realista”
Si el Signature 12.2 se te va de presupuesto (como a casi todos), no te preocupes, porque The Classic Reference también tiene mucho que ofrecer. Este modelo recoge lo mejor de otros giradiscos de la marca, como el Classic EVO o el VPO 175 Vienna Philharmonic, y lo fusiona todo en una edición limitada de altísima calidad.
Viene con el brazo EVO 9 AS HG con rodamientos de altísima precisión (ABEC-7, nada menos), dentro de una estructura de aluminio que también incluye conector SME para cambiar cápsulas fácilmente. Una gozada para los que les gusta trastear con diferentes cápsulas y ajustar todo al detalle.
El plato también es de aluminio y está amortiguado con TPE (un elastómero que reduce vibraciones), y el chasis combina MDF y aluminio con una suspensión interna que aísla el conjunto del entorno. Todo con una estética muy cuidada y la posibilidad de conectar por salidas RCA o XLR balanceadas.
Al igual que su hermano mayor, incorpora un generador de corriente AC alimentado por DC, que genera una señal de onda senoidal limpia para garantizar una velocidad de rotación ultraestable. Y por supuesto, también es compatible con el cableado True Balanced de Pro-Ject, ideal para cápsulas MC.
El precio en España es de 4.999 euros, que para todo lo que ofrece, no está nada mal. Sigue siendo caro, sí, pero aquí cada euro está justificado en materiales, sonido y diseño.
En definitiva, Pro-Ject ha demostrado con estos dos lanzamientos que sigue siendo una marca capaz de competir con los más grandes del sector high-end, sin perder su toque artesanal ni su pasión por el vinilo. Si eres de los que busca lo mejor de lo mejor, o simplemente quieres soñar con tu próximo giradiscos definitivo, el Signature 12.2 y The Classic Reference son palabras mayores. Y ya sabes cómo va esto: quien prueba uno de estos bichos, ya no vuelve atrás