¿Tienes disponibles 1,3 millones de dólares por ahí en un rinconcito de casa para construirte una sala de cine en casa? Si es así, te vamos a contar todo lo que vas a poder meter dentro a nivel de equipos. Dejando de lado las bromas, es lo que hicieron en la Sala de Sonido 7 de la CEDIA 2025, en la que se juntaron marcas como Ascendo, StormAudio, Kaleidescape, MadVR y Christie, entre otras. Y lo que hicieron fue montar un sistema de audio inmersivo con nada menos que 14.18.10 canales.
Antes de entrar a ver los equipos que formaron esta impresionante sala de cine, os vamos a contar una curiosidad. Los compañero de Ecoustics, que tuvieron la gran suerte de poder ver la demostración de la sala en directo, han contado que cuando pulsaron el botón de reproducción para iniciar la demostración las cosas no salieron como estaban previstas. Faltaban diálogos y un eco evidente afectaba el sonido de principio a fin.
Los creadores del proyecto intentaron identificar el problema, pero finalmente pidieron a los asistentes que volvieran más tarde. Resulta que, con el sistema funcionando en dos redes independientes, y toda la complejidad que suponía una infraestructura en una feria abarrotada, las dos redes perdieron la sincronización, lo que provocó la pérdida de canales y ecos. Cuando volvieron unas horas después, el problema estaba resuelto. Así que bueno, hasta cuando tienes un equipazo detrás las cosas pueden torcerse.
Ascendo y StormAudio se encargaron del sonido

Para montar una sala de cine de este calibre se juntaron algunas de las marcas más premium del sector. Los nuevos altavoces HALO 10 PRO LCR de Ascendo debutaron en esta sala de cine, con su diseño futurista de 3 vías con un tweeter coaxial central y una unidad de medios, rodeados por seis woofers que replican una fuente puntual y ofrecen una imagen de audio precisa.
Según el fabricante, y tal y como os contamos, estos altavoces alcanzan niveles de referencia de 136 dB sin distorsión significativa, así que deberían ser ideales para salas de alto rendimiento. Tres de los altavoces HALO se instalaron detrás de la pantalla Seymour, acústicamente transparente, para los altavoces frontales izquierdo, central y derecho. En la sala de cine había un total de 14 altavoces a la altura del oído, complementados con no menos de diez altavoces de techo independientes para efectos de altura.
Por supuesto los graves eran clave a la hora de montar una sala de cine de este calibre, así que se utilizaron 18 subwoofers dispuestos en un DBA (matriz de bajos dobles) para una respuesta de graves uniforme en toda la sala. En la parte trasera de la sala, Ascendo incluyó dos de sus subwoofers «THE 64 SUB», cada uno con un controlador de 64 pulgadas para proporcionar frecuencias infrasónicas (inferiores al oído humano) que presurizan la sala y dan vida a esos graves que te aplastan.
Mover un sistema de altavoces de estas dimensiones no es tarea sencilla, así que el equipo de procesado debían estar a la altura. StormAudio proporcionó su procesador Elite 32 Digital AoIP, que se encargó de gestionar el procesamiento y la calibración del sistema de audio de los 14.18.10 canales.
Este procesador AV cuenta con la tecnología DIRAC Live Active Room Treatment (ART), que permite que todos los altavoces funcionen juntos para crear un sonido envolvente y perfecto, optimizado para cualquier espacio. Curiosamente, no se ha indicado nada de la parte de amplificación, así que no sabemos si también fue proporcionada por StormAudio.
El vídeo fue cosa de Christie Digital y Kaleidescape
Una parte acústica tan profesional necesitaba una imagen acorde, así que para la sala de cine se eligió uno de los mejores y más modernos proyectores del mundo. Fue el nuevo proyector Eclipse G3 de Christie Digital, con una lente Panamorph, el que proyectaba la imagen sobre una pantalla retráctil MFR de Seymour Screen Excellence con enmascaramiento automático y una relación de aspecto de 2,4:1.

La pantalla se enmascaraba automáticamente con un lujoso terciopelo negro que absorbía la luz para dar cabida a contenido con una relación de aspecto de 16:9 y otras proporciones. Y cuando no se utilizaba, la pantalla Seymour se escondía en el techo, como cualquier buena pantalla de proyección.
Volviendo al proyector, el Eclipse G3 cuenta con una fuente de luz láser y un motor de luz DLP de 6 chips, con nada menos que 30.000 lúmenes ANSI de brillo y el 98% del espacio de color REC.2020. Un proyector que pesa más de 180 kg y que necesita un sistema de refrigeración líquida para funcionar correctamente, lo cual implica que necesita prácticamente una sala de proyección solo para él.
Como reproductor se escogió un Kaleidescape Strato V, el conocido como Netflix de los ricos. Este reproducía los clips 4K, mientras que el procesamiento de vídeo, incluyendo el mapeo de tonos HDR y la gestión del movimiento con Motion AI, corría a cargo del nuevo procesador Envy Extreme Mark III de MadVR.
La comodidad es muy importante en una sala de cine

Por último, pero no menos importante, está el tema de los asientos. Moovia dotó a la sala de cine de tres filas de sus sofás de lujo MARBELLA, unos sillones fabricados en lana italiana con ribetes en nogal.
Y por supuesto no faltó el tratamiento acústico de la sala, que corrió a cargo de Simplified Acoustics. La empresa instaló sus nuevos paneles acústicos BDP, colocados discretamente en puntos estratégicos.
Como imaginaréis, el resultado de tal montaje fue una sala de cine que superó la calidad de audio y video de muchos cines profesionales.
¿Pedimos la factura? Bueno, ya hemos comentado que el coste total de la sala ronda los 1,3 millones de dólares, pero si tenéis curiosidad por el desglose, os podemos dar algunos precios, aunque no todos, ya que los precios de algunos de los componentes no ha sido desvelado:
- Altavoces HALO 10 PRO de Ascendo: el precio todavía es desconocido
- Subwofers Ascendo: precio desconocido
- Procesador AV StormAudio Elite 32 Digital AoIP: 29.499 dólares
- Proyector Christie Digital Eclipse G3: 400.000 dólares
- Pantalla retráctil MFR de Seymour Screen Excellence: desconocido
- Kaleidescape Strato V: alrededor de 4.500 dólares
- Procesador de imagen MadVR Envy Extreme Mark III: 15.995 dólares
- Asientos Moovia MARBELLA: desconocido
Como decíamos, aquí faltaría la parte de amplificación, que no ha sido desvelada. Así que ya sabéis, si algún día os toca el Euromillon, ya tenéis una idea de cómo montar vuestra sala de cine premium.