Hace poco vimos la review del excelentísimo proyector Sony Bravia 7, una máquina de gama alta que nos encantó y por ello la firma nos ha enviado un ejemplar de su modelo más ambicioso y equilibrado de la gama alta, el Bravia 8 (si, está el Bravia 9 pero se dispara de precio aún más), un modelo que es muy similar al 7 que analizamos pero con algunas mejores importantes como una mejor óptica, más lúmenes y especialmente enfoque, zoom y desplazamiento vertical y horizontal totalmente motorizados.
En lo demás, veremos que son mucho más similares de lo que parece indicar el precio, con un brillo, contraste, nitidez y percepción de la textura del cine extremadamente visuales, aunque evidentemente este modelo 8 aporta extras como ya hemos citado, a nivel de imagen quizá el más relevante es su mejor óptica entera de cristal que ofrece una mejor convergencia y nitidez de punta a punta dela pantalla.
Sony Bravia 8 Proyector: Ficha y características técnicas
| Sony Bravia 8 (VPL-XW6100ES) | Características |
|---|---|
| Tecnología | SXRD (LCOS) de 0.61″ |
| Procesador | XR |
| Diagonal | De 60 hasta 300 pulgadas |
| Fuente de luz | Láser híbrida (20000 horas de vida útil) |
| Lúmenes | 2700 lúmenes |
| Resolución | 4K UHD (3.840 x 2.160 puntos) |
| Alto rango dinámico | HDR10 y HLG |
| Montaje | Estantería o Techo |
| Medidas | 517 x 210 x 460 mm |
| Peso | 14 Kg |
| Conectividad (Vídeo) | 2 x 2.1 (Completos, HDCP 2.3) 1 x USB A 1 x Ethernet 1 x Mini Jack |
| Tecnologías (HDMI) | 4K a 120 Hz Modo Juego de baja latencia ALLM |
| Control | Mando a distancia (retroiluminado) Botones físicos |
Este modelo de proyector sigue apostando por la tecnología de chips SXRD, es decir la tecnología LCoS o Liquid Crystal on Silicon (cristal líquido sobre silicio), un tipo de tecnología transmisiva (y no reflectiva como se da, por ejemplo, en los proyectores DLP) que usa una serie de cristales líquidos de tipo de matriz VA -como los televisores- por lo que consigue ya de serie un contraste y niveles de negro excepcionales. A cambio, son proyectores mucho más caros de fabricar y en los que cuesta mucho conseguir más lúmenes, al contrario que ocurre con los más populares DLP.
Este modelo, llamado internamente VPL-XW6100ES se sitúa en la gama alta de proyectores de Sony para cine en casa, solo por debajo del bestial Bravia 9 que también analizamos y en este caso si que es un serio candidato a rivalizar con su competencia, también japonesa: el JVC NZ800. En este caso y al igual que hace JVC, Sony usa una tecnología híbrida compuesta por diodos láser azules y un elemento de fósforo, que según la propia marca tiene una vida útil de unas 20000 horas con un uso intensivo y que en este Bravia 8 consigue elevar el brillo a 2700 lúmenes, suficiente para pantallas medianas e incluso grandes.
Al igual que en la otra marca japonesa, Sony usa la tecnología LCOS, basada en chips de 0.61″ transmisivos, es decir, existe una base reflectante de silicio que refleja la luz (como un espejo), ésta pasa por el panel, se modula según la imagen y se refleja hacia el objetivo del proyector. Con ello se consigue un muy mejorado contraste, niveles de negro y mayor densidad de píxeles, siendo éste un proyector 4K nativo real. ¿El precio a pagar? un mayor coste de fabricación y venta y una menor luminosidad que los modelos DLP.
Review Sony Bravia 8: Diseño y conectividad
Hablando sobre las especificaciones técnicas y conectividad, lo cierto es que nos sorprendió ver los conectores en el lateral, algo que pude dificultar mucho las conexiones si tenéis el proyector colgado o montado en una manera en la que sea difícil acceder al lateral. En cualquier caso, encontramos en este VPL-XW5100ES dos puertos HDMI 2.1 completos así como un puerto minijack, un USB y puerto ethernet así como los controles manuales para manejarnos por los menús.
Por otra parte y como podéis ver en la fotografía de abajo, este modelo supone un claro paso adelante en cuanto a los controles de zoom, enfoque y desplazamiento que en lugar de ser manuales como en su hermano pequeño, por fin son totalmente electrónicos y controlables totalmente con el mando a distancia, algo que a nivel de comodidad se agradece muchísimo. Disponemos de un desplazamiento de un 85% verticalmente y ±36% horizontalmente, algo más que el Bravia 7, por si no podemos tener centrado el proyector totalmente.
Por otro lado, su diseño es igual peculiar que en el Bravia 7, siguiendo ese diseño tipo destructor de Star Wars. Al igual que en su hermano pequeño, en la parte trasera (y bueno, delantera y laterales) podemos observar como el proyector tiene rejillas de ventilación por doquier para facilitar la entrada y salida de aire del mismo. No es excesivamente ruidoso (con la máxima potencia del láser si llega a ser bastante audible, pero menos molesto que en otras marcas). El flujo de aire trabaja de forma que por detrás se mete aire y sale por las rendijas delanteras.
Por último, sobre el mando a distancia nos encontramos en con exactamente el mismo mando que en el Bravia 7, a excepción de los botones de enfoque, desplazamiento y zoom que si están presentes. El mando está retroiluminado (al pulsar el botón superior izquierdo) y tiene todas las funciones al alcance de la mano, lo cierto es que noto que se ha quedado algo anticuado en diseño, demasiado grande. Aunque es cierto que todos los proyectores de gama alta como éste tienen este estilo de mando retro, por lo que imagino que es algo totalmente normal.
Review Sony Bravia 8: entorno de pruebas, opciones y configuración del proyector
Para las pruebas tengo la suerte de contar ya con la sala de cine dedicada totalmente finalizada (aunque con algunos cambios como por ejemplo tapar los cuadros con tela negra o hacer una base para el suelo también con tela negra para evitar, así, los reflejos lumínicos y aumentar el contraste del proyector). Para este análisis tenemos una pantalla Stewart Studiotek G4 Ultraperf de 130 pulgadas, con una ganancia real medida de entorno a 1,22 aproximadamente.
El proyector se encuentra, para este análisis, a unos 4.3 metros aproximadamente, lo que da como resultado que se el zoom se encuentra a la mitad aproximadamente (con lo que ganaremos más contraste aunque perdemos algo de luminosidad) para poder proyectar sobre las 130 pulgadas en formato 16:9 -para tener un tamaño adecuado con esa distancia- Respecto a la configuración del mismo, esto da aproximadamente una imagen más o menos igual de brillante que el Bravia 7 proyectando 100 pulgadas.
Sobre los menús de imagen, son bastante sencillos de entender -aunque en su sencillez se deja por el camino algunas opciones que nos hubiera gustado tocar a los usuarios más avanzados-. En fin, tenemos un montón de modos de imagen para seleccionar, desde Cine Film 1 y 2, Referencia, TV, Foto, Juego, Cine Brillante, TV Brillante, Usuario e IMAX Enhanced:
Recomiendo empezar por los dos modos Cine, que son los más cercanos a la norma cinematográfica y a la propia gamma usada en cine (2.35/2.4 en SDR, seguimiento de la curva PQ. EOTF de forma muy precisa en HDR); además este proyector también pertmie cargar curvas gamma personalizadas, por ejemplo para hacer una calibración con sonda profesional gracias a la herramienta profesional adecuada.
En cualquier caso, como veremos luego, al seleccionar Cine Film 1 o 2 nos deja una imagen fantástica en precisión de color y en temperatura del balance de blancos, aunque para ello deberemos configurar el punto de blanco en D65 (por defecto viene en D75, un punto de blanco cercano a los 7500K o Judd Voss que usa habitualmente Sony en toda su gama de televisores y proyectores): como veremos, configurándolo así nos deja un error impresionantemente bajo.
Sobre la atenuación láser, Sony solo nos deja una única opción de control, que es poniendo la opción de control dinámico en modo Limitado, lo que activa la atenuación láser y el iris dinámico. Con ello, la mejora del nivel nativo de negro es realmente bueno a la vez que es capaz de mantener una alta luminosidad en las altas luces a la vez que mantiene el suelo de negro muy bajo. Si se mide el contraste dinámico, éste excede los 400000:1 (Infinito según Sony), mientras que el contraste nativo -medido desde la lente- nos ofrece unos 12000:1.
Review Sony Bravia 8: calidad de imagen
Lo primero que me llamó la atención fue ver que el color era más frío de lo normal, algo que se soluciona cambiando al modo de imagen Cine Film 1 y ajustar la opcíón de la temperatura de blanco a D65. Con ello, conseguimos una alineación RGB del balance de blancos fantástica, algo que por ejemplo podemos ver en la tonalidad de piel de los actores. Aunque viene realmente bien ajustado a la norma cinematográfica, cuenta con algunos errores en la gamma y color ligeramente superiores al de la unidad Bravia 7 que recibimos:
También podemos confirmar que la cobertura cromática en este Sony es superior a la competencia que usa LCOS, ya que consigue situarse entorno la 95% del espacio DCI-P3 sin perder luminosidad ni usar ningún tipo de filtro que bloquee la luz. Por lo que unido a la gran precisión de su calibración de fábrica, arroja una imagen fantástica, tanto en SDR como en HDR, aunque este último cuenta con el mismo pero que su hermano menor: el mapeo tonal.
Antes de entrar en éste, comentar que la imagen es fantásticamente buena, pero echamos en falta una atenuación láser más agresiva y efectiva en el contenido. Podemos ver como en escenas con poco APL, el contraste se mantiene de forma excelente, sin notar prácticamente ningún problema de negros levantados.
En cambio, en escenas de ciencia ficción, donde predominan un cielo negro estrellado, el proyector no efectúa ninguna bajada de luminosidad (tampoco cuenta con un IRIS que ayude a reducir el brillo) por lo que el negro se nota gris oscuro en una sala tan acondicionada como la que tengo. Además, Sony prioriza siempre mostrar todo el detalle en sombra posible antes que el nivel de negro, lo que no hace más que agravar el fenómeno. No es un problema, simplemente estamos viendo el límite de un contraste nativo de 12000:1
Review Sony Bravia 8: electrónica y mapeo de tonos
En esta sección no encontramos ningún cambio respecto al Bravia 7, ya que Sony ha mantenido aquí el famoso procesador XR con sus mismas ventajas e inconvenientes. Por ejemplo, seguimos encontramos aquí a los habituales de XR Dynamic Tone Mapping, XR Deep Black, XR TRILUMINOS PRO y XR Clear Image. Muchos de ellos son los típicos paquetes de electrónica de Sony con un nombre comercial, pero de aquí me gustaría resaltar 2 que realmente lo hacen de fábula:
- XR Deep Black: se encarga de la atenuación láser y lo cierto es que lo hace muy bien, aunque a veces puede introducir errores o ser perceptible.
- XR Clear Image: de aquí destacaría dos opciones que son un must have en Sony; su Recreación realista que le da a la imagen un look totalmente nítido y 3D, sin parecer artificial y su Motionflow, que sin duda es el mejor del mercado en cuanto a movimiento.
Si nos vamos al XR Dynamic Tone Mapping…es sin duda el punto más flojo de la electrónica, ya que aunque está por encima de la media de mapeos tonales de la competencia (Epson, BenQ, etc.) se queda varios enteros por debajo de JVC, su principal competidor. En este Bravia 7 tenemos solo 3 opciones de mapeo tonal que no se basan en el DML para saber los picos de brillo adecuados, si no que es un mapeo estático para toda la película. Habrá películas que con el Modo 1 sea correcto, otras con el 2, otras con el 3 y otras que con ninguno:
Estos tres niveles de mapeo pueden combinarse con la opción potenciador HDR dinámico, que ofrece una compresión más de la gamma (junto al mapeo de tonos y a la atenuación láser) para encontrar la fórmula que mejor funcione -insistimos: lo malo es que cada película tiene una propia-:
Por lo tanto, pondría la electrónica a un nivel que roza el 10 si no contamos el mapeo de tonos, que aunque ha mejorado respecto a otros años, sigue sin ser tan preciso como debería. En nuestro caso, para evitar problemas con el mapeo tonal, hemos usado también el proyector con un equipo con MadVR que se encarga del mapeo de tonos, convirtiendo además la gamma EOTF en una gamma de potencia 2.4 y aprovechar así la excelentísima calibración de fábrica que tiene este modelo. Y la verdad es que la ganancia en calidad de imagen es enorme.
Por último, en términos de nitidez y de enfoque…es otro de los puntos donde el Bravia 8 mejora al 7 de forma importante. A diferencia de su hermano menor, el Bravia 8 está equipado con un sistema enfoque flotante que utiliza dos grupos de lentes móviles y cristal de dispersión extra baja para obtener imágenes sin distorsiones. Y lo cierto es que consigue un efecto de enfoque buenísimo con una convergencia casi perfecta (la unión de los colores rojo, verde y azul de punta a punta de la pantalla) con un marcado pop en la imagen -ayudado, también, por el procesador de imagen XR-:
Sony Bravia 8 Proyector: un proyector 4K láser nativo con una gran calidad de imagen
Bueno, como conclusión…no podíamos esperar menos de Sony y uno de sus buques insignia, sin embargo, me parece que las mejoras que aporta (mejor óptica y enteramente de cristal, focus, desplazamiento y zoom motorizados y unos 500 lúmenes más) quizá no justifiquen el aumento del precio al doble, aunque también es cierto que en estas gamas nunca se justifica.
Si queremos uno de los mejores proyectores láser que hay en el mercado, lo cierto es que pocos puntos negativos podemos ponerle las conclusiones seguirían siendo las mismas que en el caso del Bravia 7: tenemos una fuente de luz láser con fósforo azul (por lo que no tendremos problemas como el moteado láser de los proyectores triple láser) con una vida útil que excede los 20000 horas. Resolución nativa 100% 4K real (y no mediante pixel shift), 2700 lúmenes, óptica 100% de cristal y de mejor calidad, focus, desplazamiento y zoom motorizados y un gran contraste nativo de 12000:1 gracias al uso de chips SXRD (LCOS). Por supuesto, la electrónica es cum laude, marca Sony, con un pero.
Ese pero sigue siendo la gestión del mapeo tonal del HDR y es algo que le pasa a todos los proyectores, ya que comprimir picos de brillo de 3 y 4000 nits en 150 nits es una tarea titánica y que requiere mucha potencia bruta (de ahí que recomendamos hacer este proceso con un equipo mediante MadVR). Su otro gran pero, a mi juicio, sería la falta de un modo de atenuación láser más agresivo, ya que el actual solo apaga el láser cuando la imagen es 100% negra, lo cual es prácticamente inservible en el contenido de hoy en día para ayudar al contraste real.
Por otro lado, este proyector también está enfocado mucho al mundo gamer gracias a sus puertos HDMI 2.1 completos con 120 Hz, aunque en este rango de precios ya encontramos que la competencia está equipada con lo mismo -algo que en el caso del Bravia 7 no era así-. En definitiva, un proyector de gama alta totalmente premium con un precio también totalmente premium.
