Los televisores de gran tamaño siguen su aumento en ventas. Y es una constante que se da en todo el mundo. Como ya vimos, la gente demanda más y más tamaño para perseguir esa sensación inigualable de inmersión que ofrece un cine y para ello, si o si es necesario un televisor gigante (o un proyector). Precisamente, el otro día también vimos que el tamaño importa para conseguir ese efecto y para ello debemos sentarnos a la distancia precisa.
Ya no solo es que se vendan más televisores de 75 pulgadas que nunca, es que incluso se empieza a mover el mercado en 80 o más pulgadas, que han visto incrementadas sus ventas de forma notable y, según indica la firma de auditorías externas Omdia, se espera que este sector de televisores de tamaño de 80″ o más siga creciendo un 44% en los próximos cinco años. De ahí la insistencia de los fabricantes en sacar televisores cada vez más grandes.
El televisor de 80 pulgadas o más: clave en el crecimiento de las ventas de las Smart TV gigantes
Como no podía ser de otra manera, las marcas chinas lideran el aumento de ventas en modelos de 80″ o más, concretamente es TCL la marca que más vende televisores de 85 y 98 pulgadas, seguido de Hisense con televisores de 100 pulgadas; tras ellas ya aparecen las marcas coreanas y japonesas, como, LG, Thomson, Samsung, Sony y otras. La tendencia no muestra signos de desaceleración, al revés: siguen vendiendo cada año más y más modelos de gran tamaño.
Una de las causas, lógicamente, es la bajada drástica de precios en modelos que siguen siendo premium. Ya no solo son televisores grandes, si no que ahora además tienen una gran calidad de imagen a unos precios casi imposibles. ¿Las causas? que las firmas chinas priorizan cuota de mercado y la visibilidad de marca sobre la rentabilidad en el segmento premium. Al menos de momento.
Omdia sigue creyendo que el mercado de televisores experimentará un crecimiento -aunque muy míninimo-, pasnado de de 209 millones de unidades de TV vendidas en 2025 a 211 millones en 2029, siendo el segmento de televisores gigantes de más de 80 pulgadas el que impulsa el aumento.
Los televisores Mini LED y Micro RGB: los grandes beneficiados a costa de las OLED
Como habéis podido ver, el aumento de las ventas de TV para los próximos años será casi todo gracias a las TV gigantes. Y ahí, de momento, es coto de caza privado de la tecnología Mini LED o de la más nueva Micro RGB, dado que de momento los televisores OLED por encima de las 83 pulgadas son extremadamente caros, casi un 800% más que el equivalente de gama de un televisor Mini LED de 97 pulgadas, por ejemplo.
Como decíamos, la llegada de la tecnología Micro RGB podría suponer un auténtico antes y después, no solo por el aumento de la calidad de imagen que conlleva si no por el abaratamiento de la gran pulgada. Es más, la calidad de imagen es tan buena que podrían competir perfectamente con los televisores OLED a unos precios mucho más competitivos, especialmente en grandes tamaños de diagonal.
Es por ello que Hisense ya ha anunciado la llegada de televisores Mini LED RGB más económicos y de diferentes tamaños, mientras que el resto de fabricantes como Sony y Samsung también incorporarán esta tecnología a más modelos, no solo a su modelo estrella. La cuarta en discordia, LGm también ha insinuado que lanzarán modelos de televisores LED RGB, siguiendo así la demanda del mercado.
También vale la pena señalar que los fabricantes de televisores aparentemente se están centrando más en la tecnología Mini LED RGB que en la resolución 8K para televisores de tamaño ultra grande. Y es normal, porque aún tienen que crecer unas cuantas pulgadas más para que la resolución 8K tenga sentido.